Montoro ha sido estos días noticia nacional por dos circunstancias. La primera porque ha vuelto a dar la máxima temperatura en la llamada ola de calor que padecimos a mediados de agosto. Fue un récord, según las mediciones realizadas en la red principal de observatorios de la Agencia Estatal de Meteorología -probablemente esa temperatura se superó en algún sitio -la temperatura alcanzó los 47,2 grados. Superar esos 47 grados suponía batir el anterior récord ostentado por Córdoba cuando se llegó a los 46,9 grados el 13 de julio de 2017. La segunda circunstancia fue el descarrilamiento de un tren de mercancías en su término municipal, sin que hubiera que lamentar desgracias personales, acaecido en su término municipal por las mismas fechas en que el calor apretaba de lo lindo. Ese accidente en la vía férrea que conecta Andalucía con la Meseta y el norte peninsular la mantuvo fuera de actividad durante una semana en que se realizaron los trabajos para poder restablecer el servicio.
Se trata de una vía férrea, de gran importancia para dar salida a los contenedores que llegan al puerto de Sevilla y sobre todo al de Algeciras. Sólo hay esa y fue construida en el siglo XIX. Al ser única, su colapso durante una semana causó considerables perjuicios. Las consecuencias económicas han sido muy graves, principalmente en el puerto de Algeciras, uno de los más importantes de Europa, gracias a su posición geográfica y si no lo es más es consecuencia de un grave déficit de infraestructuras. Cientos de contenedores hubieron de ser transportados por carretera y las propuestas alternativas fueron derivar los convoyes hacia Extremadura, cuyas deficiencias ferroviarias son sobradamente conocidas, lo que creó serios problemas y grandes retrasos. Todo debido a que, como hemos señalado, sólo existe una vía para dar salida a las mercancías que desde Algeciras tienen como destino Europa.
El trazado de una doble vía es una vieja reivindicación que no ha encontrado el debido eco en los sucesivos gobiernos de España de diferente signo político, pese a ser una necesidad imperiosa y que, desde hace casi una década, Europa estableció como una prioridad poner en funcionamiento nueve grandes corredores con el objetivo de mejorar la vertebración de Europa. Dos de esos corredores arrancan de la Península Ibérica -el corredor Atlántico y el Mediterráneo- y ambos contemplan la modernización de la vía que conecta, desde Algeciras, Andalucía con el norte. ¿Habrá algún dinero de esa riada de millones que dicen llegará a España para de tratar de paliar los efectos de la pandemia en nuestra maltrecha economía? Veremos. Lo que sí sabemos es que Sánchez ya se ha comprometido a entregar a Cataluña, gobernada por quienes quieren separase de España, 1.700 millones de euros para ampliar el aeropuerto de Barcelona.
(Publicada en ABC Córdoba el 4 de septiembre de 2021 en esta dirección)